mayo 30, 2019

Lo que nadie quiere hablar del embarazo

¿Por qué nadie me dijo que esto sería así?
Mis síntomas del primer trimestre fueron duros y de hecho se extendieron casi hasta todo el 4to mes y mientras vivía toda la experiencia sabía que quería contarlo, para tal vez ser de ayuda a alguna otra chica que pudiera encontrarse en el mismo lugar que yo.
Es obvio que como mujeres todas escuchamos cosas algún momento de nuestras vidas sobre el embarazo, además vemos películas, leemos historias, sin embargo considero que cuando quedé embarazada todo lo que empezó a pasarme me cayó como un balde de agua fría. Y lo más curioso es que a medida que empezaba a preguntar o a comentarlo con alguien que había sido mamá, no se sorprendían y me decían ah sí es normal. Entonces poco a poco fui dándome cuenta de que todo era parte de, pero nadie hablaba de eso.

Pienso que esto pasa porque estar embarazada se considera una bendición y un milagro (y estoy de acuerdo con eso), entonces no se quiere hablar de todo lo malo que puede suceder al rededor de este estado y en realidad es algo que pasa con la maternidad en general. A las mujeres les da culpa quejarse de la maternidad por miedo a cómo van a ser juzgadas. También es cierto que no todos los síntomas son iguales para todas las mujeres, algunas no sienten nada, pero hoy quiero hablar por las que sí sentimos. Pienso que hablar sobre esto puede ayudar a otra mujer a estar preparada y además de eso, contribuyo a que se tome un poco más en serio y se valore todo lo que debemos pasar las mujeres al cargar a nuestros bebés 9 meses en la panza. Ya que una mujer embarazada debe lidiar con su entorno y éste muchas veces toma a la ligera lo que está pasando y muchas veces por falta de empatía termina haciéndote daño.

Como ya les conté, mi embarazo no fue planificado. Me enteré que estaba embarazada cuando tenía 7 semanas; yo si me sentía diferente pero pensaba que tal vez tenía gastritis o que ya me tocaba desparasitarme jaja. Literalmente al siguiente día de confirmar mi embarazo y escuchar el latido, empezaron los vómitos. Poco a poco mi cuerpo se fue transformando, luchaba por adaptarse a este proceso de dar vida a otro ser humano y en ese camino yo me sentía fatal. Vomitaba por regla todas las mañanas al levantarme y luego era como una lotería si tal vez venían uno o dos más durante el resto de la mañana mientras estaba en la oficina, sentía una especie de gastritis todo el tiempo, que iniciaba a las 5 de la mañana y me hacía que me levantara y que lo único que la aliviaba era comer todo el tiempo. A pesar de comer todo el tiempo (sin ganas), sentía una languidez y un cansancio extremo que de verdad no puedo explicar. Lograr estar 8 horas en el trabajo era literalmente un sacrificio, porque estaba agotada todo el tiempo, incluso se me llegó a bajar la presión un día en el trabajo y a esto sumemos que empezó a darme estreñimiento, cosa que yo jamás había tenido. Llegaba de la oficina a dormir, me levantaba a comer algo y me volvía a dormir, no hablaba con mi esposo, era un ente, no me reconocía y parecía que eso sería eterno.

La verdad es que a pesar de considerarme una mujer que sabe un poquito de cada cosa, me di cuenta que no tenía ni idea de lo que era estar embarazada y todo lo que me estaba pasando me hacía sentir frustada, muchas veces incluso derrotada y me preguntaba (más de una vez con coraje y otras veces con tristeza) ¿por qué nadie habla de esto?

Por supuesto como en cualquier travesía de esta vida te encuentras con personas que iluminan tu vida (otras que logran lo contrario, pero a esas no hay que darles espacio ni en un post) y así me pasó, llegaban amigas que me daban ánimo y que me decían que ya iba a pasar y que me olvidaría de todo, tenía una familia que siempre se preocupaba por mí y unas compañeras de trabajo que me apoyaban mientras yo estaba literal en la M jaja. Y es que les cuento que la parte emocional juega un papel muy importante en el embarazo. "Tu tribu" debe ayudarte y mi consejo es que nunca te guardes las cosas que sientes, convérsalas con las personas que amas y que confías y pídeles que sean tu apoyo en esta etapa. No sientas que estás loca si quieres ir al sicólogo o a clases de yoga para poder estar en paz, creéme que todo lo que estás sintiendo tiene una raíz y por tu bien y el de tu bebé debes estar cuidada siempre, tanto física como emocionalmente.

No pierdas las esperanzas ni la ilusión, siempre trata de seguir adelante y como dice mi amiga Karlita, convéncete de que "todo dura solo un momento" y en algún momento tus achaques llegarán al final, ya sea al 1er trimestre o al final del embarazo, pero no serán eternos y después de eso sabrás que eres la mujer más fuerte de este planeta y creéme que eso hará que nunca vuelvas a ser la misma, pero en el mejor de los sentidos. Ser mamá es tener un superpoder.

Quiero terminar con este post dándoles luz a todas esas embarazadas que ahorita están pasándola mal, a mis 8 meses  me siento muy bien físicamente, tengo energía y estoy en la etapa más hermosa de mi embarazo.

Más adelante les compartiré qué cosas hice que me ayudaron tanto física como emocionalmente, para que puedan servirles de ayuda. Y siempre pueden escribirme ¡me encanta conversar! y dar tips.

Pauli.


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