septiembre 19, 2019

Mi testimonio de lactancia

Todos los que no son padres y sobre todo las que no son mamás puede que estén hart@s de ver tanto post y foto sobre la lactancia. Y sobre todo sé que hay quienes se preguntan por qué las mamás de ahora tienen que andar subiendo fotos "mostrando las chichis". Por esa razón dudé si subía algo yo, pero después de pensarlo por unos días me di cuenta que si debía hacerlo y por una razón: dar de lactar requiere de parte de la mujer conocimiento y empoderamiento.  

A pesar de ser algo natural, la lactancia ha estado rodeada de muchos prejuicios e imaginarios que han logrado que se vuelva un tabú más de nuestra sociedad. Y la única forma de romper los tabús es hablando de ellos, mostrándolos. Está comprobado que la lactancia es algo que se aprende y sobre todo se hace en comunidad, incluso las monas en cautiverio no saben cómo dar de lactar y tienen que enseñarles. Por eso nosotras las mamás debemos hablar sobre ella y mostrarla, para que las otras mujeres aprendan y cuando llegue su momento ya estén familiarizadas y no sientan miedo y por qué no, para que se les vaya la vergüenza también.

Para ser honesta la lactancia era algo que me aterraba, me daba mucho miedo "no tener leche" o "que mi bebé no se agarre", en fin, con tantas historias que uno escucha, temores me sobraban, sin embargo, de algo estaba segura: YO QUERÍA INTENTARLO.


El primer paso fue informarme y empezar a ver que muchas cosas que me habían dicho o contado no eran correctas. Empezando por la historia que escuché toda mi vida: la mía. Mi mamá siempre me contó lo horrible que fue para ella la lactancia conmigo, como se le destrozaron literalmente las chichis y como incluso lloraba, en vez de ser un proceso bonito al principio fue horrible para ella. Me di cuenta que en la época de nuestras Mamás nadie en realidad les enseñaba, era algo que debían hacer y punto. Eso ahora en nuestra época, no va más. Además de la información que encuentras en internet, existen cursos prenatales e incluso consejeras de lactancia que pueden ayudarte el día de tu parto. Puedes adecuar los recursos a tu bolsillo. En mi caso leí mucho y fui a un curso prenatal.

El 2do paso fue trabajar mi autoestima y mis temores, con la información bajo el brazo, me embarqué en una preparación mental para sentirme capaz de hacer esta hermosa tarea. Con la información, te empoderas y entiendes que puedes hacerlo, solo debes creerlo. Dentro de mis afirmaciones diarias incluí la siguiente: Mis pechos se llenan de leche para poder darle de comer a mi bebé. Ni siquiera sé cuándo se empiezan a llenar los pechos de leche JAJAJA, pero era una frase para reforzar uno de mis temores: no tener leche.

El 3er paso fue hablar con mi pediatra/neonatologa y contarle que para mí era muy importante dar de lactar y le conté mis miedos: "que si le daban formula o biberón después no iba a querer mi chichi", "que si no hacíamos apego no iba a poder dar de lactar", "que si se me iban a lastimar las chichis". Ella no es precisamente una Dra. mega pro apego o pro lactancia, es medio de la vieja escuela, pero me dijo que no me preocupe, que no piense en eso, que siempre había que pensar primero en como nacía la bebe y que si algo no andaba bien conmigo o con ella iban a tener que darle formula e incluso me mando a comprar unas botellitas de leche líquida para tener ese día, y sobre si se lastimaban o no las chichis me dijo que era algo que podía pasar, pero que todas las mujeres eran capaces de dar de lactar y que no me encierre en eso. Hablamos de todas las posibilidades y dejé claro que siempre la primera opción sería dar de lactar y ella lo entendió.


El último y 4to paso para iniciar la lactancia fue ya estando en la clínica con Catalina y creo que es el más importante: Pierde el miedo y pierde la vergüenza por tu cuerpo, por tus senos específicamente. Y esto créanme que es importantísimo, porque si estas estresada o ansiosa, no va a funcionar. Todo lo relacionado al parto está conectado con la parte más primitiva de nuestro cerebro y nuestra YO moderna, bloquea con sus miedos a esa YO primitiva que sabe cómo alimentar a su bebé. 

Prepárate para el escenario en la clínica, ¿quiénes estarán ahí? ¿quieres estar sola? ¿quieres que esté tu esposo? ¿quieres que esté tu Mamá? Adelántate a esto y no dejes que te coja de sorpresa. Anticípate a que estarás con los pechos descubiertos con una enferma que te va a ayudar con la bebé, y necesitas estar cómoda con el ambiente. En mi caso estaba mi esposo, mi hermana, mi Mamá y la enfermera, a excepción de la enfermera esas 3 personas en el cuarto son personas a las que les tengo la confianza de pararme completamente desnuda frente a ellas (para que entiendan de qué tipo de confianza hablo). Si no es tu caso y eres más pudorosa entonces cuando vaya a ser el momento de lactar pide que todos salgan y quédate sola con la enfermera. Créeme que este es tu momento y sí importa cómo te sientes. No olvides hablar esto antes con tu esposo o pareja para que estén alineados. A muchas mujeres esto les incomoda, pero por vergüenza a pedir que la gente salga del cuarto aceptan una situación con la que no se sienten cómodas y eso puede frustrar el proceso de lactancia.


Con todo esto que les dije ayudé a que mi lactancia fuera exitosa, a pesar de que Catalina y yo pudimos estar juntas recién 3 horas después de mi cesárea, esto no fue un problema. Dejé que la enfermera me ayudara y no voy a mentir si tardé unos minutos en lograr el agarre y fueron los minutos más eternos del mundo y las siguientes veces también tardaba unos minutos en lograrlo, incluso ya en casa, y esto me lleva a dejar claro que se necesita mucha paciencia y calma en estos momentos, porque puede llegar a ser muy frustrante ver como tu bebe está desesperado por comer y no logra agarrarse rápido.

No olviden comprar una crema para ayudar a que las chichis no se lastimen. Cada mujer es distinta, pero esto ayuda muchísimo. Tomen en cuenta que si se lastiman demasiado los senos puede ser porque tu bebe no está lactando de forma correcta o la posición no es la adecuada. Esto es algo que detiene mucho una lactancia exitosa y de acuerdo a la información actual dar de lactar no debe ser sinónimo de dolor. Yo desde que estuve en el cuarto de la clínica me puse la crema y lo hacía a cada rato entre tomas y no se me lastimaron los senos. Al 5to día aproximadamente tuve una pequeña grieta en una chichi y me di cuenta al bañarme, pero se cerró en menos de dos días. La crema que yo usé fue la de Medela (la compré en Amazon).

Antes de despedirme para resumir y dejar claro todo, si quieres dar de lactar:

- Infórmate y capacítate, si puedes asiste a un curso prenatal.
- No evites tus miedos, se consciente de ellos y después de que los tienes claros, trabájalos.
- Haz una lista de afirmaciones para ayudar a tu mente y a tu cuerpo a creer en este proceso. Por ej.: "Mi cuerpo sabe lo que tiene que hacer", "Tendré mucha leche", "Mi proceso de lactancia será exitoso". ¡Nunca sobrestimes el poder de la mente! Repítelos todos los días durante tu embarazo.
- Trata de huirle a la gente negativa y si no queda otra ignora sus comentarios, de lo contrario busca gente positiva que te aliente a este proceso.
- No olvides informar y capacitar a las personas que te rodearán en los primeros días como tu esposo y tus padres, recuerda que necesitas apoyo no dudas o comentarios errados.
- Sé paciente, difícilmente lo lograrás de inmediato. Recuerda que tú y tu bebé se están adaptando el uno al otro.
- ¡¡No te des por vencida!! Si tienes un inicio complicado busca ayuda. Hoy en día las consejeras de lactancia pueden ir a tu casa o al hospital a rescatarte. 2 opciones son: Stefy Pow y Dalila Gonzalez (están en Instagram).
- ¡No te presiones tanto! Finalmente, si algo pasa y no puedes dar de lactar no será el fin del mundo. Tu bebé será amado y sentirá tu cariño y cuidado de todas formas.


Gracias por leerme!

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